Los resortes de torsión desempeñan principalmente un papel de equilibrio en la producción industrial. Por ejemplo, en el sistema de suspensión de un automóvil, que interactúa con los amortiguadores del automóvil, el ángulo de torsión del resorte deforma el material y lo devuelve a su estado original. Evitando así que el coche tiemble demasiado, lo que juega un buen papel en la protección del sistema de seguridad del coche. Sin embargo, el resorte se romperá y fallará durante todo el proceso de protección, lo que se denomina fractura por fatiga, por lo que los técnicos o consumidores deben prestar atención a la fractura por fatiga. Como técnico, debemos hacer todo lo posible para evitar esquinas afiladas, muescas y cambios repentinos de sección en el diseño estructural de las piezas, reduciendo así las grietas por fatiga causadas por concentraciones de tensión.